Habitan en Canadá, Groenlandia, Dinamarca, Noruega, Rusia, Alaska y existen ejemplares en Islandia.
Este animal carnívoro se alimenta de crías de focas y algunas veces de renos, llegando a comer hasta 30 kg diarios de alimento. Debido a que el agua de esos lugares es salada, no la consumen y por lo tanto aprovechan los fluidos necesarios de la sangre de sus presas.
Se han estudiado casos de canibalismo, principalmente de machos que al tener escasez de alimento, opta por alimentarse de algún otro oso polar joven o muerto.